Vacaciones en Mendoza (Parte 2) El Hotel
- Nicolas Pablovich
- 29 sept 2015
- 2 Min. de lectura
Como adelanté en mi primer entrada sobre las vacaciones que realizamos en Mendoza, en esta segunda entrada hablaremos sobre el hotel donde nos alojamos.
Nos hospedamos en el hotel Amerian Executive Mendoza, un hotel de 4 estrellas ubicado frente a la Plaza Italia en la dirección San Lorenzo 660.
Tuvimos la suerte de que, nada más llegar nos hicieron upgrade de las dos habitaciones que habíamos reservado, pasándonos tanto a mis padres como a mi y a mi esposa a habitaciones suites.
Las suites tenían una habitación con cama matrimonial, y un living compuesto por un escritorio y un juego de sillones.
El desayuno era muy abundante y de muy buena calidad y algo que me llamó la atención y que no ví en ningún otro hotel donde me alojé es que ofrecían un servicio de merienda en el mismo restaurante, obviamente con mucha menos oferta que el desayuno pero que nos parecio un gran detalle.
¿Cuál era la oferta del desayuno? Pues jugos de naranja y pomelo, va

rios tipos de infusiones, unos cupcakes de limón (que a mi esposa le encantaron), huevos revueltos, panceta, salchichas, cereales, frutas, pan, y todo lo que uno esperaría encontrar en cualquier desayuno típico de hotel.
Además, el hotel cuenta en su último piso con un gimnasio y una terraza con piscina descubierta. Al respecto de dicha piscina decir que aunque es de agua fría, al estar expuesta al calor mendocino, la temperatura es muy agradable pero si van a estar un largo rato allí, no olviden ponerse protector solar pues de lo contrario sufrirán las consecuencias... (hablo por experiencia propia)...
El hotel también contaba con un restaurante que debo decir, era de muy buena calidad al igual que el servicio al cuarto que proporcionaba. El menú del servicio a la habitación era diferente al que existía en el propio restaurante, estando el primero compuesto por platos más sencillos como milanesas, sandwichs de lomo y hamburguesas... Pero aún así, los platos ya sean en el restaurante o en el servicio a la habitación eran exquisitos.
Por último, decir que el servicio fue genial. Comenzando desde el momento en el cual tras llegar nos ofrecieron el upgrade de habitaciones. Las habitaciones siempre se mantuvieron limpias y todo el personal siempre se mostró atento a nuestras necesidades.
Y bueno, ésta fue la segunda parte de nuestra crónica de las vacaciones en Mendoza. A partir de la próxima ya les contaré sobre los lugares que visitamos. Hasta el próximo post...
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